Proun 5 A
La preocupación política se manifestó en el arte de El Lissitzky en la adopción de una tendencia formalista que le condujo a la abstracción. En sus Proun, que creó como metáfora de las transformaciones de la sociedad, El Lissitzky combinaba de manera armoniosa la superficie plana suprematista con las leyes de la arquitectura constructivista. En estas composiciones, que se distinguen por la precisión de sus formas, su equilibrio y su claridad, el pintor utiliza los medios de la arquitectura pero los despoja de su función arquitectónica y les otorga un nuevo valor estético. Además, con sus Proun Lissitzky encontró la fórmula para conciliar los postulados utilitarios de Tatlin con la estética utópica de Malévich y logró desarrollar el suprematismo en el espacio.
Proun 5 A, perteneciente al Museo Thyssen-Bornemisza, es quizá el más cercano al suprematismo de Malévich. La composición se estructura alrededor de un punto sobre el que giran o flotan las formas geométricas. En una inscripción al dorso, el hijo del pintor, Yen Lissitzky, autentificó la obra en 1975. Por su parte, de Proun 4 B, existen dos acuarelas que podrían ser estudios preparatorios para el lienzo de la colección Thyssen-Bornemisza.
A mediados de los años veinte, El Lissitzky se convirtió en una de las figuras clave del constructivismo europeo, y durante el tiempo que vivió en Alemania ejerció una significativa influencia en los artistas seguidores de esta corriente, en especial en los componentes del grupo holandés De Stijl y en el entorno de la Bauhaus.
Paloma Alarcó