El siglo XX
En 1925 Sándor Bortnyik regresó a Budapest después de un largo viaje por Austria y Alemania, donde abrió un taller de diseño de carteles que estuvo en funcionamiento hasta 1938. El siglo xx, de la colección del Museo Thyssen-Bornemisza, es un homenaje del pintor a su época. El asunto representado en este lienzo es el progreso industrial y la tecnología, un tema central para la vanguardia de entonces. La composición evoca un espacio ambiguo que recuerda a los Proun de El Lissitzky, combinado con la presencia del «Nuevo Hombre», simbolizado a través de unos boxeadores robotizados, que enlaza también con el interés de los artistas rusos por buscar una imagen atlética del hombre.
Por otra parte, esta representación del «Nuevo Hombre» la ha tomado Bortnyik de las «figuras triádicas» de Oskar Schlemmer y de las anatomías mecánicas de Willi Baumeister, a quienes conoció durante su estancia en la Bauhaus. Además, la visión del mundo que subyace en esta pintura puede relacionarse con la soledad del ser humano en un mundo cada vez más mecanizado, que aparece en las pinturas tanto de Léger como de De Chirico.
Paloma Alarcó