Gerrit Dou
Leiden, 1613-1675
Hijo de Douwe Jansz., vidriero y grabador, nació en Leiden en 1613. Trabajó inicialmente con su padre y estuvo inscrito, entre 1625 y 1627, en el gremio de vidrieros de la ciudad. En 1628, a la edad de quince años, comenzó a formarse en el taller de Rembrandt con quien permaneció tres años. Bajo la influencia del primer estilo de Rembrandt, Dou se inició en la tradición de Leiden de cuadritos pequeños de minucioso acabado.
Cuando su maestro se trasladó a Amsterdam, en 1631, Dou se estableció como maestro independiente en su ciudad natal, donde permaneció el resto de su vida. Durante los años siguientes fue refinando su técnica, perfeccionando las superficies esmaltadas de sus obras, que constituyen su distintivo, e interesándose cada vez más por los pequeños detalles. Fue miembro fundador del gremio de San Lucas de Leiden y sirvió como alférez en la milicia local. En 1647 realizó La tendera (París, Musée du Lovre), con la que introdujo un nuevo estilo conocido como «piezas de nicho», representaciones de una escena o una figura vista a través del arco de una ventana. A finales de la década de los años cincuenta prestó gran interés a los efectos lumínicos en la pintura, que trasladó a dos temas nocturnos en concreto: escenas de género iluminadas artificialmente, y figuras femeninas situadas ante una ventana iluminadas únicamente por una vela o un candil. Trabajó un amplio repertorio de temas además del retrato y las escenas de género, como las figuras, los animales y los bodegones, y fue uno de los pocos pintores holandeses del siglo XVII que realizó desnudos.
El éxito que Gerrit Dou tuvo durante su vida, atrajo a numerosos discípulos y seguidores, como Gabriel Metsu, Frans van Mieris el Viejo y Godfried Schalken, y su fama se extendió también fuera de las fronteras de los Países Bajos, encontrándose entre sus clientes la reina Cristina de Suecia, el archiduque Leopoldo Guillermo y el rey Carlos II de Inglaterra.
Cuando su maestro se trasladó a Amsterdam, en 1631, Dou se estableció como maestro independiente en su ciudad natal, donde permaneció el resto de su vida. Durante los años siguientes fue refinando su técnica, perfeccionando las superficies esmaltadas de sus obras, que constituyen su distintivo, e interesándose cada vez más por los pequeños detalles. Fue miembro fundador del gremio de San Lucas de Leiden y sirvió como alférez en la milicia local. En 1647 realizó La tendera (París, Musée du Lovre), con la que introdujo un nuevo estilo conocido como «piezas de nicho», representaciones de una escena o una figura vista a través del arco de una ventana. A finales de la década de los años cincuenta prestó gran interés a los efectos lumínicos en la pintura, que trasladó a dos temas nocturnos en concreto: escenas de género iluminadas artificialmente, y figuras femeninas situadas ante una ventana iluminadas únicamente por una vela o un candil. Trabajó un amplio repertorio de temas además del retrato y las escenas de género, como las figuras, los animales y los bodegones, y fue uno de los pocos pintores holandeses del siglo XVII que realizó desnudos.
El éxito que Gerrit Dou tuvo durante su vida, atrajo a numerosos discípulos y seguidores, como Gabriel Metsu, Frans van Mieris el Viejo y Godfried Schalken, y su fama se extendió también fuera de las fronteras de los Países Bajos, encontrándose entre sus clientes la reina Cristina de Suecia, el archiduque Leopoldo Guillermo y el rey Carlos II de Inglaterra.