Raoul Dufy
Le Havre, 1877-Forcalquier, 1953
Dufy nace en El Havre en 1877 y muy temprano se manifiestan su afición y sus dotes para la pintura. A los dieciocho años de edad ingresa en la École des Beaux-Arts de Le Havre, donde conoce a Othon Friesz.
Por esa época le influyen los «artistas de la modernidad». Entre 1895 y 1898 pinta paisajes y escenas de género al estilo de Boudin, Corot o Sisley. En 1899 se traslada a París, matriculándose en la École Nationale des Beaux-Arts. Asiste a las clases de Léon Bonnat y profundiza en el estudio de los pintores impresionistas y postimpresionistas.
A principios del siglo XX ya ha adquirido cierta fama. Expone en el Salon des Artistes Français (1901) y en el Salon des Indépendants (1903).
El año 1905 marca un primer hito en su obra. Se une al movimiento fauvista, creado en torno a Matisse. Pinta calles empavonadas y numerosos paisajes de litoral. Su paleta se ilumina, su trazo se suelta.
En 1907 abandona a los fauves y se alista en las filas cubistas, donde se codea con Picasso, Derain y Léger.
En 1910 crea sus primeros grabados. Ilustra muchas obras, en particular el famoso El bestiario o El cortejo de Orfeo de Guillaume Apollinaire, antes de trabajar con Poiret y para la sedería lionesa Bianchini-Ferrier.
En 1919, recién terminada la Primera Guerra Mundial, Dufy desarrolla un estilo más personal. Su grafía adquiere mayor agilidad y energía, su paleta se aclara. Se instala en el sur de Francia y viaja por la cuenca mediterránea.
Pinta composiciones con orquestas, marinas y carreras. Le gusta plasmar la alegría y el movimiento.
Dufy fallece en Forcalquier en 1953. Deja una obra muy copiosa, compuesta por unos tres mil cuadros al óleo, seis mil acuarelas, cuatro mil dibujos de gran tamaño, mil quinientos estampados para tela, grabados, xilografías, piezas de cerámica e incluso tapices.
Fanny Guillon-Laffaille
Por esa época le influyen los «artistas de la modernidad». Entre 1895 y 1898 pinta paisajes y escenas de género al estilo de Boudin, Corot o Sisley. En 1899 se traslada a París, matriculándose en la École Nationale des Beaux-Arts. Asiste a las clases de Léon Bonnat y profundiza en el estudio de los pintores impresionistas y postimpresionistas.
A principios del siglo XX ya ha adquirido cierta fama. Expone en el Salon des Artistes Français (1901) y en el Salon des Indépendants (1903).
El año 1905 marca un primer hito en su obra. Se une al movimiento fauvista, creado en torno a Matisse. Pinta calles empavonadas y numerosos paisajes de litoral. Su paleta se ilumina, su trazo se suelta.
En 1907 abandona a los fauves y se alista en las filas cubistas, donde se codea con Picasso, Derain y Léger.
En 1910 crea sus primeros grabados. Ilustra muchas obras, en particular el famoso El bestiario o El cortejo de Orfeo de Guillaume Apollinaire, antes de trabajar con Poiret y para la sedería lionesa Bianchini-Ferrier.
En 1919, recién terminada la Primera Guerra Mundial, Dufy desarrolla un estilo más personal. Su grafía adquiere mayor agilidad y energía, su paleta se aclara. Se instala en el sur de Francia y viaja por la cuenca mediterránea.
Pinta composiciones con orquestas, marinas y carreras. Le gusta plasmar la alegría y el movimiento.
Dufy fallece en Forcalquier en 1953. Deja una obra muy copiosa, compuesta por unos tres mil cuadros al óleo, seis mil acuarelas, cuatro mil dibujos de gran tamaño, mil quinientos estampados para tela, grabados, xilografías, piezas de cerámica e incluso tapices.
Fanny Guillon-Laffaille