Cristo y la mujer adúltera
Aert de Gelder se inició en la pintura en su ciudad natal con Samuel van Hoogstraten. Sus estudios los continuó, durante aproximadamente unos dos años, en el taller de Rembrandt en Amsterdam, donde llegó hacia 1661. Tras esta estancia regresó a Dordrecht, donde ejerció su carrera hasta su muerte en 1727. De Gelder se dedicó a la pintura de historia, religiosa y mitológica, al igual que al retrato, y a lo largo de toda su carrera en Dordrecht tuvo en cuenta las enseñanzas de su maestro. Pese a su herencia estilística, De Gelder, independientemente, labró su propia personalidad y sus composiciones fueron adquiriendo profundidad y espaciosidad, con un colorido en el que combinó verdes olivas, grises y marrones con gamas de naranjas, amarillos y violetas, logrando brillantes resultados y juegos armónicos. Houbraken comentó que este artista no sólo siguió a Rembrandt en cuestiones artísticas, sino que, como él, se dedicó a coleccionar objetos antiguos, tales como armaduras y armas, además de trajes y otras rarezas, y que, como su maestro, los utilizó en sus pinturas. En sus primeras obras es visible el paso por el taller de Rembrandt en las composiciones, en los modelos y en la técnica empleada.
El episodio bíblico que De Gelder representa en el lienzo está recogido en los Evangelios, y según las Escrituras tiene lugar en el templo, edificio que el artista ha concebido a gran escala, como se deduce del tamaño y del volumen de los pocos elementos arquitectónicos que emplea para encuadrar la escena y de la dimensión de las figuras. El momento que ha elegido, con Cristo sentado y la mujer arrodillada y llorando, corresponde al instante en que los escribas y fariseos preguntan a Jesús si debe aplicarse sobre ella la ley de Moisés, cuyo castigo es apedrear a quien se ha sorprendido cometiendo adulterio. De Gelder ha dispuesto el suceso en una esquina del templo, en la que los personajes ocupan el lateral derecho de la tela. La pintura, como se ha reseñado, se inspira en composiciones con el mismo asunto de Rembrandt, como la que se conserva, fechada en 1644, en la National Gallery de Londres, o los bocetos que, en torno a 1659, estudian agrupamientos de figuras para el episodio. Sumowski también mencionó como antecedente un grabado de Rembrandt, de 1639 o posterior, con La presentación de Jesús en el templo, como otra de las posibles fuentes de inspiración para el lienzo de De Gelder. La pintura está fechada en 1683, y en ella se suceden los recuerdos de Rembrandt tanto en la composición como en los personajes que visten llamativos y exóticos ropajes. De Gelder utiliza un colorido bastante homogéneo con predominio de pardos y verdes que sirven tanto para el decorado como para los trajes de las figuras, y que rompe con fuertes colores locales, como el rojo del personaje de espaldas que sostiene un bastón, y con los blancos que emplea en algunos detalles de las ropas. La pintura intentó identificarse, sin éxito, con una obra de igual tema registrada en el inventario del pintor realizado a su muerte en 1727.
Mar Borobia