Los santos médicos Cósme, Damián y Pantaleón
El Maestro de la Visión de san Juan fue un artista activo en Colonia, en la segunda mitad del siglo XV. Su estilo aúna la influencia de la pintura los Países Bajos con la de la escuela de Colonia y que se reflejan en la dureza de sus figuras y en los vivos colores que recuerdan los de Stefan Lochner. En esta obra se representa a tres santos mártires: Cosme, Damián y Pantaleón, con sus rostros individualizados y colocados en semicírculo. El artista ha utilizado una amplia y rica gama cromática en las vestimentas de los personajes. Asimismo, ha llevado a cabo un interesante estudio de los reflejos lumínicos en los botes de metal, que portan dos de los santos. San Cosme y san Damián, en el centro y a la izquierda respectivamente, fueron hermanos gemelos y famosos por sus curaciones; San Pantaleón situado a la derecha, también médico, perteneció a otra época. Estos tres mártires estuvieron vinculados a la ciudad de Colonia.
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Estos tres santos médicos han podido identificarse por las inscripciones que figuran en sus halos. San Cosme, en el centro, y san Damián, a la izquierda, eran hermanos gemelos y su historia como sanadores de hombres y de animales se recoge en La leyenda dorada. Nacidos en Egea, adquirieron fama por los resultados y los éxitos obtenidos en una profesión que ejercían gratuitamente. Los dos, junto con sus otros tres hermanos, sufrieron martirio por orden del procónsul de Lisias en el año 287, en tiempos del emperador Diocleciano. La leyenda dorada narra varios episodios de sus vidas en los que se describen las curas que estos santos médicos realizaron y entre las que se encuentra una de las más famosas: la amputación y posterior trasplante de una pierna a un enfermo. Por su parte, san Pantaleón, la figura de la derecha, que también ejercía la medicina pero en Nicomedia, Bitinia, practicaba su profesión, al igual que sus colegas, sin retribución alguna; san Pantaleón sufrió martirio en el siglo IV, con el emperador Maximiano. A estos tres mártires se les identifica, además, por los objetos que portan, que guardan relación con su actividad. Los tres están vinculados a la ciudad alemana de Colonia, donde san Pantaleón tenía bajo su advocación una abadía en la que se custodiaban santas reliquias del mártir y también existía un monasterio, fundado en el siglo IX, bajo la protección de los tres santos médicos.
Esta tabla, que ha estado registrada en los catálogos de la Colección como obra de un artista anónimo activo en Colonia, fue adscrita al Maestro de la Visión de san Juan por Stange. Otto Fischer relacionó la pintura con una Adoración de los Magos, conservada en el Toledo Museum of Art, Ohio, y que perteneció al mismo conjunto que estos tres santos. Las similitudes entre estas dos tablas son evidentes en los tipos fisonómicos empleados para los personajes, en el tratamiento de los oros, en los dibujos de los brocados y en los halos, así como en otros detalles que afectan a la construcción de las figuras. A este conjunto Lübbeke añadió otras dos imágenes más en las que se representa al Arcángel San Gabriel y a La Virgen María, y que juntas constituyen una Anunciación. Esta Anunciación perteneció, hasta 1945, al Deutsches Museum.
El pintor, sobre un fondo de oro, ha instalado a sus tres santos, que se presentan al espectador en semicírculo. Los rostros de los tres mártires están perfectamente individualizados y en sus ropas el artista hace gala de una rica gama cromática, que combina con elegancia y en la que juega con los colores, los tonos y las texturas. San Damián y san Pantaleón portan en sus manos botes metálicos, que en ambos casos sirven para estudiar sobre su superficie los reflejos que proyectan sus dedos.
Esta pintura perteneció a la colección Wallraf de Colonia, donde se expuso hasta 1924. Se incorporó a la colección Thyssen-Bornemisza procedente del mercado de arte suizo en 1934.
Mar Borobia