Retrato de un hombre
Antonello da Messina, que, según Vasari aprendió la técnica al óleo directamente de la mano de Van Eyck durante una estancia en Flandes, es la figura más importante de la escuela siciliana y el difusor en Italia de la entonces novedosa técnica del óleo. Formado en Nápoles, su paso por Venecia, donde apenas estuvo un año, desde noviembre de 1475 hasta antes de septiembre de 1476, fecha en la que está documentado de nuevo en Mesina, fue decisivo para el desarrollo del género del retrato en esa ciudad. La huella que este pintor dejó en artistas como Giovanni Bellini fue determinante y sus secuelas llegan a la generación siguiente, a la que pertenecieron Giorgione y Tiziano. Actualmente la tesis generalmente aceptada sobre la formación de Antonello es la de que se inició en el taller de otro pintor siciliano, Colantonio, rechazándose la hipótesis difundida por Vasari sobre su viaje al norte de Europa; hipótesis que parece una invención destinada a explicar la dependencia nórdica que se aprecia en la obra del siciliano.
La circulación de estilos que tuvo lugar durante el siglo XV en la Italia meridional, donde se conjugaron influencias italianas, españolas, provenzales y flamencas, ha sido uno de los puntos en los que se ha fijado la crítica moderna para establecer los vínculos de Antonello con el arte de los Países Bajos. Sin embargo, las vías concretas a través de las cuales Antonello aprendió y asimiló los elementos nórdicos visibles en su obra no han sido resueltos aún satisfactoriamente. Su conocimiento de la obra de Van Eyck y de Van der Weyden ha sido explicado aludiendo a las pinturas de estos maestros que se encontraban en Nápoles en la colección de Alfonso I. En cuanto a la dependencia de modelos de Petrus Christus, la cuestión de una posible formación con este pintor se encuentra también sin resolver.
La pintura, que lleva en el parapeto la inscripción en letras mayúsculas «Antonellus Messanus Pinx», perteneció a la colección de sir George Houston-Boswell, en Caulderhaugh, Escocia, que la recibió en herencia. Más tarde pasó a lady Houston-Boswell, en Windsor, y a Mrs. Phoebe Timpson, en Goring-on-Thames, tercer propietario que tuvo en Gran Bretaña y el último antes de ingresar en la colección Thyssen- Bornemisza. La tabla entró en la colección de Lugano en 1964.Durante el tiempo que este óleo permaneció en colecciones inglesas fue expuesto una sola vez en Londres, en el Burlington Fine Arts Club, entre 1934 y 1935, y la primera referencia bibliográfica fue precisamente de 1964, coincidiendo con su entrada en Villa Favorita. Este primer comentario estuvo a cargo de Philip Hendy, que la incluyó en su estudio sobre algunas pinturas italianas del Renacimiento de la Colección, y al que siguió, tres años más tarde, el de Pallucchini, entrando a formar parte desde entonces del catálogo de retratos del artista.
Este retrato de un personaje desconocido se incluye dentro de la docena de efigies autógrafas que de este maestro han llegado hasta nosotros. El tipo y la forma encajan dentro del arquetipo utilizado por Antonello. Sobre un fondo oscuro se coloca el modelo, cuyo rostro emerge con fuerza, situado de tres cuartos y mirando al espectador intensamente. La solidez de la cabeza, en la que se cuidan meticulosamente los detalles, como el cabello y la barba, se suaviza con unos contornos delicados y un modelado que dulcifica los rasgos y que nos remite, con un acento personal, a modos italianos. La obra se encuentra firmada en el borde inferior, parapeto que sirve de arranque del personaje. Este recurso fue utilizado por Antonello en otros retratos, como el del Museo Civico de Turín y el del Musée du Louvre. Este parapeto también fue el lugar favorito de Antonello para situar un cartellino con su firma y la fecha de su trabajo (como los ejemplos mencionados) o para incluir su nombre a modo de inscripción (como en esta tabla). Respecto a la fecha de ejecución de la pintura se han barajado dos opciones: un poco antes del viaje del pintor a Venecia, hacia 1472-1473, o dentro de su producción veneciana, 1475-1476. Rosenbaum comparó el busto de este joven con otros dos más: uno en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York y otro perteneciente a la colección Johnson del Museum of Art de Filadelfia. La pintura fue recortada en su borde inferior y trasladada al soporte actual.
Mar Borobia