Interior de una iglesia gótica
1615 - 1616
Óleo sobre tabla.
39,3 x 58,8 cm
Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid
Nº INV.
298
(1980.39
)
Sala 25
Planta segunda
Colección permanente
Peeter Neeffs fue uno de los pioneros en Flandes de la pintura de interiores de iglesias. El interés de Neeffs por este motivo, que, como en la pintura holandesa, constituyó un género independiente en el siglo XVII, pudo deberse a dos artistas: Hendrick van Steenwijck, el Viejo y el Joven. La similitud que se desprende entre la producción de Neeffs I y la de estos dos pintores, tanto en el estilo como en la elección de los temas, ha llevado a suponer que nuestro artista se formó en un entorno próximo a ellos. La representación de interiores de iglesias fue un asunto popular en la primera mitad del siglo XVII, especialmente en la ciudad de Amberes, contribuyendo a su éxito la edición de tratados de arquitectura y perspectiva como el de Jan Vredeman de Vries. Peeter Neeffs I nos dejó en sus pinturas numerosos interiores de templos góticos, de una o varias naves, inspiradas en los edificios de esta ciudad y especialmente en su catedral.
En este interior, Neeffs I ha elegido un espacio estructurado con tres naves, separadas por sólidos pilares que reciben los nervios de las bóvedas. La composición se apoya en un dibujo limpio que va creando, con los elementos constructivos, una profunda perspectiva a la que contribuye eficazmente el enlosado del suelo y la sucesión de espacios abovedados. Una luz blanquecina, que se filtra por las altas filas de ventanas de los laterales, inunda el espacio resaltando las dimensiones y la profundidad del edificio. Esta luz, sin embargo, carece del tratamiento atmosférico que los artistas holandeses imprimieron a este tipo de interiores, ciñéndose, en este caso, a respaldar el diseño. Neeffs I reproduce un interior sobrio y diáfano con pequeñas capillas en los laterales y en los pilares de la nave central. Precisamente en uno de estos ámbitos sagrados se está celebrando un oficio litúrgico con un sacerdote de espaldas al espectador y varios fieles arrodillados en el suelo. La ceremonia que conduce el sacerdote posiblemente sea un funeral, ya que, en el centro y al fondo de la nave central, reposa, flanqueado por cirios, un féretro cubierto con un crespón. Peeter Neeffs I colaboró con otros pintores para las figuras de sus cuadros, entre ellos Frans Francken II y III, David Teniers II y Sebastiaen Vrancx. En este caso se ha mencionado la posibilidad de que el autor de los personajes que llenan la iglesia, y que ayudan con su dimensión a aumentar las proporciones arquitectónicas sea Frans Francken II.
En la pintura figuran dos fechas: 1615 en la plegaria que aparece enmarcada y colgada en el primer pilar a la derecha y 1616 bajo un escudo de armas también a este lado de la composición. Gaskell intentó buscar una explicación a estas dos fechas barajando la posibilidad de que ambas estuvieran en relación con la conclusión de la pintura: una por parte de Neeffs I al finalizar el interior y la otra al incorporar las figuras a la composición. También mencionó la opción de que el segundo año pudiera corresponder a una supervisión del pintor hecha a su propia obra una vez incluidos los personajes. El óleo se ha relacionado por su similitud con dos composiciones más: una en el Museo de Dresde y la otra en el mercado de arte, en 1935, atribuida precisamente a Hendrik van Steenwijck, el Joven.
Mar Borobia
En este interior, Neeffs I ha elegido un espacio estructurado con tres naves, separadas por sólidos pilares que reciben los nervios de las bóvedas. La composición se apoya en un dibujo limpio que va creando, con los elementos constructivos, una profunda perspectiva a la que contribuye eficazmente el enlosado del suelo y la sucesión de espacios abovedados. Una luz blanquecina, que se filtra por las altas filas de ventanas de los laterales, inunda el espacio resaltando las dimensiones y la profundidad del edificio. Esta luz, sin embargo, carece del tratamiento atmosférico que los artistas holandeses imprimieron a este tipo de interiores, ciñéndose, en este caso, a respaldar el diseño. Neeffs I reproduce un interior sobrio y diáfano con pequeñas capillas en los laterales y en los pilares de la nave central. Precisamente en uno de estos ámbitos sagrados se está celebrando un oficio litúrgico con un sacerdote de espaldas al espectador y varios fieles arrodillados en el suelo. La ceremonia que conduce el sacerdote posiblemente sea un funeral, ya que, en el centro y al fondo de la nave central, reposa, flanqueado por cirios, un féretro cubierto con un crespón. Peeter Neeffs I colaboró con otros pintores para las figuras de sus cuadros, entre ellos Frans Francken II y III, David Teniers II y Sebastiaen Vrancx. En este caso se ha mencionado la posibilidad de que el autor de los personajes que llenan la iglesia, y que ayudan con su dimensión a aumentar las proporciones arquitectónicas sea Frans Francken II.
En la pintura figuran dos fechas: 1615 en la plegaria que aparece enmarcada y colgada en el primer pilar a la derecha y 1616 bajo un escudo de armas también a este lado de la composición. Gaskell intentó buscar una explicación a estas dos fechas barajando la posibilidad de que ambas estuvieran en relación con la conclusión de la pintura: una por parte de Neeffs I al finalizar el interior y la otra al incorporar las figuras a la composición. También mencionó la opción de que el segundo año pudiera corresponder a una supervisión del pintor hecha a su propia obra una vez incluidos los personajes. El óleo se ha relacionado por su similitud con dos composiciones más: una en el Museo de Dresde y la otra en el mercado de arte, en 1935, atribuida precisamente a Hendrik van Steenwijck, el Joven.
Mar Borobia