Formación. Tripartición
La carrera artística de Oskar Schlemmer discurre en paralelo a la de la Bauhaus. En esta escuela impartió clases de dibujo del natural, una disciplina que era considerada como indispensable, a pesar del rechazo de sus miembros por toda clase de academicismo. Schlemmer escribió en su diario que enseñaba a sus alumnos a crear imágenes del hombre idealizadas, que tenían que «derivar hacia el lado de los espacios metafísicos, de las perspectivas metafísicas, de la figura metafísica», para obtener así «hombres perfilados, no hombres diferenciados». Hacia 1926, año en que se fecha esta obra del Museo Thyssen- Bornemisza, Schlemmer añadió a sus enseñanzas de dibujo del natural nociones sobre las proporciones del cuerpo y sobre aspectos filosóficos y psicológicos del ser humano.
Formación. Tripartición forma parte de una serie de ocho acuarelas realizadas entre 1925 y 1931 en relación con su pintura Tripartición, fechada entre 1925 y 1928, perteneciente a una colección privada. La acuarela de la colección Thyssen-Bornemisza estuvo fechada durante un tiempo en 1929, pero al conocerse su inclusión en una exposición en Dresde en mayo de 1926, Karin von Maur rectificó la datación. En este conjunto de obras, Schlemmer, un convencido cultivador del esoterismo, establece una simbología del número tres, como ya había sucedido en su Ballet triádico (Das Triadische Ballet) de 1921, en el que se creaba un mismo juego simbólico a través de tres bailarines y tres movimientos musicales. El artista aspiraba a trasladar a la escena los nuevos conceptos sobre la relación del hombre con el espacio a partir de un análisis geométrico de las formas corporales y de los movimientos en el espacio. Esta ambiciosa obra se convirtió en ejemplo paradigmático del nuevo ballet como arte total, a través de la fusión de danza, diseño de vestuario y música.
Paloma Alarcó