Walter Sickert
Múnich, 1860-Bathampton, 1942
Walter Richard Sickert es considerado uno de los pintores más influyentes dentro del panorama británico de las primeras décadas del siglo XX. Sus obras se han visto como el punto de arranque de las corrientes pictóricas figurativas modernas en Gran Bretaña. Hijo de una familia de artistas de origen danés, emigró a Inglaterra junto a su familia en 1868. Tras unos primeros años en los que trabajó como actor, empezó a estudiar pintura en 1881, en la Slade School of Art de Londres, y pocos meses después se convertiría en el discípulo de James Whistler. Tras conocer a Edgar Degas en París en 1883 y encontrarse con él de nuevo en Dieppe durante el verano de 1885, regresó a Londres, donde se interesaría por la representación de carreras de caballos, escenas de circo y, algo más tarde, de los musichalls. En todas estas obras la deuda con Degas es evidente.
En 1888 entró a formar parte del New English Art Club, y en 1889 participó en la organización de la London Impressionists Exhibition. Durante esos años intentó sin éxito ganarse una reputación como pintor de retratos, para finalmente trasladarse en 1898 a Dieppe, donde viviría hasta 1905 y donde regresaría tras el fin de la Primera Guerra Mundial. Durante este periodo, que dedicó fundamentalmente al paisaje, visitó Venecia en tres ocasiones. En el último de estos viajes, realizado en 1903-1904, además de reproducir la arquitectura de la ciudad, comenzó a representar escenas de interiores austeros en las que las protagonistas eran una o dos mujeres. Tras su regreso a Londres en 1905 se convirtió en el principal nexo artístico de la época entre Francia y Gran Bretaña. En 1911 se erigió como líder del Camden Town Group. Posteriormente comenzó su labor docente en la Rowlandson House de Hampstead (1910-1914) y en el Westminster Technical Institute (1908-1918). A partir de la década de 1920, las fotografías comenzaron a reemplazar a los dibujos como base para sus pinturas, lo que le dio la libertad de no necesitar encargos y de poder realizar retratos de personajes famosos.
En 1888 entró a formar parte del New English Art Club, y en 1889 participó en la organización de la London Impressionists Exhibition. Durante esos años intentó sin éxito ganarse una reputación como pintor de retratos, para finalmente trasladarse en 1898 a Dieppe, donde viviría hasta 1905 y donde regresaría tras el fin de la Primera Guerra Mundial. Durante este periodo, que dedicó fundamentalmente al paisaje, visitó Venecia en tres ocasiones. En el último de estos viajes, realizado en 1903-1904, además de reproducir la arquitectura de la ciudad, comenzó a representar escenas de interiores austeros en las que las protagonistas eran una o dos mujeres. Tras su regreso a Londres en 1905 se convirtió en el principal nexo artístico de la época entre Francia y Gran Bretaña. En 1911 se erigió como líder del Camden Town Group. Posteriormente comenzó su labor docente en la Rowlandson House de Hampstead (1910-1914) y en el Westminster Technical Institute (1908-1918). A partir de la década de 1920, las fotografías comenzaron a reemplazar a los dibujos como base para sus pinturas, lo que le dio la libertad de no necesitar encargos y de poder realizar retratos de personajes famosos.