Anton Mauve
Anton Mauve nació el 18 de septiembre de 1838 en Zaandam. Su padre era predicador baptista; poco después del nacimiento de Anton, la familia se trasladó a Haarlem. Éste recibió sus primeras clases de dibujo del pintor de animales Pieter van Os, y de Wouterus Verschuur, célebre por sus interiores de establos. En 1858 estuvo en el pueblo de Oosterbeek, el llamado «Barbizon» holandés, en el que se reunían los artistas jóvenes para estudiar la naturaleza «en plein air». Allí conoció a pintores tales como Paul Gabriel, Willem Maris y Gerard Bilders. Después, Anton pasó un período de tiempo viviendo en distintas ciudades de los Países Bajos, hasta que en 1871 decidió fijar su residencia en La Haya. Se casó con Ariette Carbentus, prima de Vincent van Gogh. Su amistad con los pintores de Oosterbeek fue una excelente vía para introducirse en los círculos del grupo de la Escuela de La Haya, del que llegó a ser uno de los principales representantes. Sus cuadros tuvieron mucha aceptación y se vendían bien gracias a los buenos contactos internacionales del tío de Vincent van Gogh, a la sazón marchante de arte en La Haya.
En 1881 Van Gogh decidió que quería ser pintor y le pidió a Anton Mauve que le ayudara en sus inicios. Mauve, que tenía un estudio muy bien instalado, le permitió que trabajara en él y que hiciera dibujos y acuarelas de sus modelos. A principios de 1882 Van Gogh y Mauve tuvieron serias discusiones por culpa de la relación de Vincent con la prostituta Sien Hoornik. Al final Vincent se marchó de La Haya, pero siempre habló con respeto de Mauve, al que consideraba un gran artista.
Anton Mauve empezó a trabajar en los alrededores de Laren, pueblo pintoresco situado entre Amsterdam y Utrecht. Incluso decidió marcharse de La Haya e instalarse en Laren, en una casa a la que le puso de nombre «Ariette» en honor a su mujer, y que estaba cerca del páramo donde le gustaba ir a pintar al aire libre y del Museo Singer.
Mauve murió inesperadamente en 1888. Vincent van Gogh quiso rendir homenaje al artista enviándole a su viuda una de las tres versiones de árboles en flor que había pintado en Arlés, con la dedicatoria «Souvenir de Mauve».
John Sillevis
