El Gran Canal con Santa María della Salute
Algunos de los datos que tenemos sobre la formación y los primeros años de oficio de este artista, que falleció prematuramente con treinta y dos años, se deben a Orlandi y a su Abecedario Pittorico. Independientemente de esta fuente, las primeras noticias vinculan a Marieschi al mundo de la escenografía y de la arquitectura efímera, medios en los que trabajaba en Venecia a principios de la década de 1730. Este diseñador de eventos, que más tarde se dedicó a la pintura y al grabado, tal vez pasó por el taller de Gaspare Diziani durante su periodo de aprendizaje. Los inicios de Marieschi no son el único factor difícil de fijar en su carrera. A ellos hay que añadir la cronología de sus obras, así como su colaboración con su ayudante más próximo, Francesco Albotto, que, a la muerte de Marieschi, continuó imitando su estilo, hecho que ha dificultado las atribuciones. Marieschi pudo decantarse por los «caprichos» y por las vistas de Venecia a raíz del éxito de Canaletto, pensando que este tipo de representaciones podían tener una buena aceptación entre la misma clientela a la que iban destinadas las del célebre maestro veneciano. Marieschi, además de estudiar la pintura de Canaletto, tuvo también presente la de Luca Carlevaris y Marco Ricci, especialmente sus «caprichos». Entre los protectores con los que contó, hay que mencionar, una vez más, al mariscal Von Schulenburg, para el que realizó una serie de vistas.
Esta vista del Gran Canal con Santa Maria della Salute ingresó en la colección Thyssen-Bornemisza en 1970. Con anterioridad había pertenecido a la colección de Dimitri Tziracopoulo en Atenas, siendo objeto de estudio por parte de Constable, que la recogió en su monografía de Canaletto en 1962, unos años antes de ingresar en Villa Favorita. La pintura se ha datado en la última etapa del pintor, hacia 1738-1740, y está considerada por la crítica una obra autógrafa.
Marieschi representó este tramo del Gran Canal varias veces, conservándose de él diversas versiones. El pintor nos ofrece una vista frontal dominada por uno de los edificios más emblemáticos de Venecia, junto con la plaza de San Marcos y el Palazzo Ducale: la iglesia de Santa Maria della Salute. Este conjunto, diseñado por Baldassare Longhena, se consagró en 1687 y se levantó en agradecimiento a la Virgen al finalizar la plaga de peste que sufrió la ciudad entre 1629 y 1630. Marieschi, en este conjunto, ha destacado la gran cúpula, así como uno de sus elementos más representativos: las voluminosas volutas con esculturas. Esta inmensa mole queda enmarcada a sus lados por la abadía de San Gregorio y el Seminario Patriarcale, y entre estos edificios y el espectador se instalan las aguas del canal surcadas por góndolas con personajes elegantemente ataviados que participan en una procesión acuática, ya que la barca, interrumpida en el borde derecho, exhibe un estandarte con la Virgen. El estilo de Marieschi se caracteriza por una paleta más luminosa que la de Canaletto, como se aprecia en el celaje o en las fachadas de los edificios, a lo que se añaden encuadres escenográficos más amplios. Entre las versiones que se conocen de la vista del Museo destaca la del Art Institute de Chicago.
Mar Borobia