Estudio para Composiciones nº 7 y 8
Bart van der Leck conoció a Piet Mondrian en 1916. Un año después se convertiría en uno de los fundadores de De Stijl y, por un tiempo, adoptaría su lenguaje abstracto, basado en un espiritualismo utópico, sin abandonar el principio, para él básico, de la pintura como representación. Poco antes, en 1914, había sido contratado por Helene Kröller-Müller para diseñar los esquemas de color de las sucursales de la firma de su marido Wm H.Müller & Co., así como las vidrieras para el edificio central, que tendrían una gran repercusión en su obra posterior.
En este estudio a gran escala para Composiciones nº 7 y 8, de 1917, Leck parte de un boceto de paisaje, realizado en 1914 durante su viaje por España y Argelia. El artista, muy cercano entonces a Mondrian, se basa en una serie de rectángulos y fragmentos de líneas de color repartidos sobre un fondo blanco. Aunque la apariencia de la pintura es totalmente abstracta, una observación más detenida permite vislumbrar ciertos elementos figurativos, como las formas triangulares que parecen sugerir montañas. De hecho, esta obra adoptó en ocasiones títulos como Montañas con un pueblo en Argelia o Paisaje montañoso en Argelia con un poblado, que no dejaban lugar a dudas. Sería precisamente esta tendencia a la figuración, que no compartían la mayor parte de los componentes de De Stijl, lo que acabaría separándole de ellos. De hecho, Leck no llegó a firmar el primer manifiesto del grupo y, en 1918, escribió un manifiesto propio, titulado El jinete.
Paloma Alarcó
