Imagen radiográfica

El estudio de la radiografía aporta información de gran valor más allá de lo visible. Desvela detalles sobre la técnica pictórica que empleó el artista, la composición y la historia material del cuadro.

Detalle radiográfico para su estudio en el negatoscopio

Equipamiento

El museo cuenta con un área restringida que alberga el equipamiento radiográfico. Se compone de dos espacios: uno para el almacenaje y revelado de las placas analógicas y un recinto blindado mediante paredes de plomo para evitar la difusión de la radiación ionizante.

Esta zona sigue los protocolos de seguridad de protección radiológica, establecidos por el Consejo de Seguridad Nuclear y cuenta con personal especialmente formado y autorizado para trabajar en estas instalaciones.

 

Proceso de preparación para la toma radiográfica
Proceso de estudio radiográfico en la sala de revelado

El procedimiento que empleamos para obtener una imagen radiográfica se realiza mediante la exposición del objeto, en nuestro caso una obra de arte, a una fuente de rayos X. Ésta emite radiación electromagnética (RX) sobre la misma. Esta radiación será absorbida o atravesará el objeto, según la materia de la que esté compuesto y los parámetros de radiografía empleados. 

En el museo se trabaja siguiendo el procedimiento de radiografía analógica. Se emplea la placa radiográfica Agfa Structurix D7 y un equipo de radiografía industrial.

 

Detalle de la imagen de la obra de Balthus, “La partida de naipes”, 1948- 1950
Detalle de la radiografía de la obra de Balthus, “La partida de naipes”, 1948- 1950

Resultados ocultos

Los resultados derivados de la radiación en las obras de arte son decisivos para conocer el estado de conservación y el procedimiento creativo del artista, su técnica: estudiando la huella y el grosor de la pincelada (las veladuras o empastes) o bien, el método de aplicación (con pincel, espátula u otros) además de las características materiales de los componentes, que definen la composición pictórica.

La distinta naturaleza de los componentes materiales que constituyen la obra se muestra en una imagen radiografía con diferencias de contraste debido a la mayor o menor absorción que presentan los pigmentos a los RX.

El examen radiográfico nos permite obtener información sobre el estado de conservación de la obra: su estructura interna, detectando sus componentes originales y añadidos y determinando el estado de posibles procesos de restauración a los que ha sido sometido y degradaciones.

Esta técnica es determinante en los procesos de atribución de las obras de arte y en mostrar cambios de composición y arrepentimientos ocultos bajo las capas de pintura. Este procedimiento ayuda a descubrir y mostrar trazos originales de las pinturas y que posteriormente fueron modificados o reutilizados.

Imagen visible de la obra de Munch "Atardecer"
Imagen radiográfica de la obra de Munch "Atardecer"